Soy la segunda de cinco hermanos, lo que me ha hecho ser muy familiar y saber compartir desde muy pequeña.
Con tantos parientes te puedes imaginar que mi casa siempre es una fiesta y que cada dos por tres hay que organizar comidas y celebraciones. Y no tengo ningún problema en ponerme al mando y montar un sarao.
Viajar con mi marido y descubrir juntos nuevas culturas, costumbres, paisajes, maneras de vivir y la gastronomía del lugar es otra de mis debilidades.
Me defino como inconformista, y “culo de mal asiento”. Porque cuando llevo mucho tiempo haciendo la misma cosa ya estoy pensando en la siguiente.